Ir al contenido principal

Vivir el día a día en cuarentena





           Apoyarnos en nuestra familia y amistades nos proporciona comprensión, apoyo y ayuda directa. 
           Hay que organizar nuestro día a día, una vida organizada mantiene nuestra mente estable. 
           Mantener la calma y el control emocional. Esto nos permite actuar sin cometer errores. 
           Para no aumentar la alarma y angustia, tenemos que evitar los rumores y la información sesgada. 
           Para sentirnos seguros, tenemos que seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias para prevenir la transmisión de la infección. 
           Estrechar las relaciones con nuestros seres queridos nos hará sentirnos protegidos y apoyados. 
           Mantener el auto cuidado nos hará estar preparados para hacer frente a contingencias. 

           ¿Cómo se tolera la frustración de tener que detener nuestras vidas? 
           Las personas somos capaces de adaptarnos a situaciones difíciles cuando existe un objetivo claro como en este caso, que es mantener un bien esencial como nuestra salud cuidar de la de nuestros seres queridos, así como contribuir a la comunidad, sobre todo apoyando a las personas más vulnerables. 
           ¿Cómo tomar consciencia de que es una responsabilidad y deber común? 
           Siendo conscientes de que para vivir necesitamos a los demás. La capacidad y el desarrollo de las personas se basa en la cohesión y fuerza de la comunidad. Actuar en común aumenta nuestra eficacia si se hace de una forma coordinada. 
           Por tanto, debemos ocuparnos de mantener nuestra salud extremando las medidas de prevención y manteniendo la corresponsabilidad social. 
           ¿En quién nos apoyamos? 
           En nuestras familias, amistades y entorno. Ellos nos van a proporcionar comprensión, apoyo y ayuda directa y próxima. Podemos hacerlo de forma directa o a través de la red. Compartir con nuestros conciudadanos nuestras experiencias nos ayudará, debemos buscar el apoyo de lo que os hace sentirnos mejor. 
           ¿Es bueno ocupar la cabeza en otras cosas estos días? Esta crisis está presente en nuestras redes sociales, medios de comunicación, nuestro trabajo... ¿cómo evadirnos? 
           Hay que realizar tareas cotidianas y en muchas ocasiones la tecnología nos permite hacerlo a través de Internet. Además de tareas productivas, es recomendable mantener contacto regular con nuestras amistades, compañeros de trabajo y resto de familia a través de redes sociales. También dedicar tiempo a nuestros intereses como escuchar música, leer, dibujar, pintar, dar seguimiento a actividades culturales a través de la red, etc. Y por supuesto dedicar tiempo al ocio: escuchar música, bailar, cantar, juegos de mesa que sean creativos, etc. 
           Algo que también puede ayudar desde un principio es establecer reglas de convivencia en la casa para toda la toda la familia, vigentes durante el periodo de confinamiento. Por ejemplo, el uso del lavabo, de la cocina, de los electrodomésticos, de los alimentos, de los espacios comunes.  
           Estos días nos puede costar desarrollar labores cotidianas como realizar trabajo adecuadamente o tener problemas para conciliar el sueño 
           Hay que organizarse. Una vida organizada mantiene nuestra mente estable. Dedicar las horas necesarias a realizar el trabajo, aunque sea en casa y si tenemos más tiempo, aprovechar para actualizar los conocimientos profesionales; emplear tiempo en apoyar la actividad escolar de los menores; repartir las tareas de la casa; hacer actividad física de forma regular -por ejemplo media hora por la mañana y media por la tarde-; y mantener los horarios de las comidas y las horas de sueño, así como la higiene personal y del entorno. Es más importante que nunca no descuidarla para convivir mejor con todas las personas de la casa.  
           Además, hay que interesarse por la situación de nuestros vecinos más vulnerables -personas ancianas, solas y aisladas en cuarentena- y echarles una mano con la compra. Esto mantendrá nuestra sensación de ser productivos y eficaces. 
           ¿Nos afecta la sobreinformación? 
           Mantenernos informados es bueno y en esta situación es necesario. Pero consumir información de forma compulsiva recurriendo a múltiples medios de comunicación nos genera una hiperactivación que conduce a la ansiedad. Es mejor centrarse en un número limitado de medios que consideremos fiables y también contrastar información con gente de nuestro entorno que consideramos que están bien informados para que nos asesoren.
           ¿Cómo nos puede afectar a la salud mental la difícil situación económica que muchas personas enfrentan con esta crisis?
           El curso de la situación económica nos afecta porque nos genera incertidumbre sobre el futuro de nuestro empleo e ingresos. Frente a esto hay que pensar que en estos momentos lo importante es nuestra salud, que es el bien más preciado que tenemos y el que nos permite desarrollar todas nuestras potencialidades. Si nos cuidamos y nos mantenemos saludables física y mentalmente, seremos capaces de superar cualquier vicisitud futura. Es posible que se pasen momentos duros, pero la economía global acabará por recuperarse si la sociedad se mantiene saludable.
           Además, hay que ser conscientes de que dentro de esta crisis mundial, ocupamos un lugar privilegiado. Estamos pasando una epidemia en un lugar organizado, con recursos, pero hay millones de personas que han pasado otras más letales, como el ébola, sin apenas medios sanitarios y con estados de gran fragilidad. Dentro de nuestro propio país, hay entre 30.000 y 40.000 personas sin hogar que sí  van a tener dificultades muy serias para sobrevivir a este momento. 

           ¿Cómo manejamos nuestras expectativas? 
           Es aconsejable establecer unos plazos para no generar incertidumbre que puede conllevarnos a ansiedad. Es probable que la situación se alargue en el tiempo por lo que hay que pensar como en una carrera de fondo, intentar planificarla por etapas y mantener el ritmo
            @médicosdelmundo

Mas información

Quantum Mèdical Lleida- Dra.Laura Arnold

Los brotes de listeriosis y la Sra.Listeria

Listeria monocytogenes es un patógeno (bacteria) que cuando se encuentra en los alimentos, puede causar serias enfermedades, principalmente en grupos de alto riesgo como personas con el sistema inmunitario debilitado, mujeres embarazadas,fetos en gestación y recién nacidos. Listeria monocytogenes es una importante causa de abortos, septicemia o infección del SNC(sistema nervioso central). Antiguamente, los brotes se vinculaban con una gran variedad de alimentos, especialmente carnes procesadas (salchichas, paté, productos precocidos); en la actualidad, la mayoría se vinculan al consumo de leche cruda o quesos elaborados con leche sin pasteurizar. La importancia de la listeriosis para la salud pública no siempre es reconocida, sobre todo porque es una enfermedad relativamente rara, en comparación con otras más comunes como la salmonelosis. Sin embargo, debido a su alta tasa de letalidad,(peligro de muerte) la listeriosis se encuentra entre las causas más frecuentes de muerte por

No es una dieta, es un estilo de vida!!!!

No es una dieta, es un estilo de vida….. Para perder peso se necesita algo más que el deseo de hacerlo. Es necesario comprometerse y tener un plan bien pensado. Esta es una guía paso por paso de lo que puede hacer para comenzar. Paso 1: Comprométase Paso 2: Ubique su realidad Paso 3: Fije metas realistas Paso 4: Identifique recursos de información y apoyo Paso 5: Lleve un seguimiento continuo de su progreso Paso 1: Comprométase. Tomar la decisión de perder peso, cambiar de estilo de vida y volverse más saludable es un gran paso. Comience simplemente por hacer un compromiso con usted. A muchas personas se les facilita poner su compromiso en un contrato por escrito. Este contrato puede incluir aspectos como la cantidad de peso que desea perder, la fecha en que busca haberlo perdido, los cambios en la dieta que hará para adoptar hábitos de alimentación saludables y un plan para hacer actividad física de manera regular. También es útil po

LA INGESTA EMOCIONAL

Comedores compulsivos : cuando el hambre no es física, sino emocional ¿Te has fijado en la manera en que comes? ¿Has observado si ingieres sin hambre? ¿Utilizas la comida para aliviar tu ansiedad o tus preocupaciones? Si intuyes que esto puede estar pasándote, tal vez estés utilizando erróneamente los alimentos para combatir el aburrimiento, la soledad, el estrés o el enfado. Lo  saludable es afrontar estos estados con otras estrategias distintas a la comida, pero para ello el primer paso es  aprender a detectar cuándo te estás comportando como comedor emocional. Veamos ocho rasgos que te permitirán distinguir el hambre emocional del hambre fisiológica: 1.  ¿Cuándo aparecen?  Mientras que el hambre física se presenta de forma gradual (va dando señales estomacales poco a poco), el hambre emocional  te interrumpe bruscamente  en momentos en los que ni siquiera estás pensando en comida. 2. ¿Qué demandan?  Cuando el hambre es física, estás abierto a ingerir los diferentes al